En el capítulo actual de la telenovela bélica Samsung vs Apple ahora le toca el turno de avanzar al gigante Apple con una prohibición ganada en los tribunales Australianos para prohibir la venta de las Tablet Samsung Tab  y los Teléfonos Samsung Galaxy S2.

¿ El argumento del pleito Samsung vs Apple ?

La actual batalla de Samsung vs Apple se basa en el argumento de Apple -en el papel de querellante-  de que tanto la tablet como el teléfono de Samsung son fieles y exactas copias de la iPad y el iPhone.  No se que opinan ustedes, queridos lectores, pero yo creo que cualquier tablet y cualquier teléfono puede ser llevado a la apreciación de que son «exacta copia».

 Si partimos de la base de similares funcionalidades -a grosso modo, porque nosotros tenemos claro que Android está a años luz de distancia del recortado y super-controlado IOS de Apple-  es muy probable entonces que ambas marcas terminen con productos de similar o idéntica forma (rectangular, redondeados) y similar diseño visual, incluyendo un marco alrededor de la pantalla, botones muy seguramente colocados donde los estudios de usabilidad dictan para nuestra mejor ergonomía, etc.

Samsung vs Apple:  ¿ Apple puede reclamar algo ?

Si fuera por el tema de las tablets, «la primer tablet» que vió la humanidad fue en el estreno de 2001 Odisea del Espacio, del único e increíblemente futurólogo Stanley Kubrik. Luego han habido otras tablets, ya con windows XP -de echo el Windows XP tenía una versión «Tablet Edition» y a principios de la década del 2000 se podía comprar una Tablet Motion Computing … Quizás estos argumentos sirvan como precedente de que no es lógico ponerse a discutir si un teléfono o una tablet se parecen entre distintos fabricantes, para darle la derecha a uno de ellos en un mercado.

Quizás no estemos entendiendo completamente la argumentación que se traen en esta batalla legal de Samsung vs Apple, y si es asi, quizás algún usuario mas letrado pueda comentarnos cómo es que un juzgado puede determinar que Samsung se quede afuera de un país por vender una tablet o un teléfono «que se parecen» a otro, pero en definitiva tienen distintos sistemas operativos, logos, botones, etc.  Mientras eso no ocurra, a nuestro entender la argumentación que sostiene este pleito de Samsung vs Apple es ridícula.